Las vacunas que las grandes farmacéuticas han empezado a distribuir y aplicar desde diciembre pasado en el planeta, en un principio, son para uso de emergencia, no para suministro a nivel generalizado; para eso habrá que esperar el transcurso del primer trimestre.

Ante este escenario, los analistas auguran que deberá venir de la mano de una recuperación económica intensa, acompañada de recuperación del empleo y de la confianza para que se vuelva a consumir de forma importante. Por lo pronto, los mercados se mantienen cautelosos a la evolución de la estrategia y políticas de logística de los gobiernos para devolver la confianza de los consumidores a través de la vacuna.