Crece logística de última milla, ante aumento de ventas online

Para los nuevos aficionados a las compras online, no hay nada peor que una mala experiencia al recibir un pedido.

Que no llegue a tiempo, no tener la posibilidad de devolverlo fácilmente o no tener la flexibilidad de recogerlo en algún punto distinto, puede resultar una compra amarga para el consumidor y un dolor de cabeza para el vendedor.

Y es que la “última milla” es la parte final del trayecto en el proceso de entrega de un pedido al cliente. De tal manera que tener éxito en esta etapa se ha vuelto crucial para las empresas y las marcas, pues de esta experiencia depende gran parte de la confianza del consumidor y el éxito del comercio online.

Si bien el e-commerce se convirtió en uno de los sectores de mayor dinamismo desde el surgimiento de la pandemia de la COVID-19, la distribución de última milla ha cobrado auge con la llegada de más jugadores interesados en encontrar nuevas áreas de oportunidad en este negocio.

Cada vez es más larga la lista de plataformas que buscan resolver el último trayecto de la logística. Una de ellas es Treggo, una firma argentina que apenas en enero comenzó operaciones en la Ciudad de México y pronto brindará el servicio en Guadalajara, Monterrey, Puebla y Querétaro.

Matías Lonardi, cofundador y CEO de Treggo, señala en entrevista que este tipo de plataformas colaborativas de logística, están creciendo de manera significativa a raíz de la pandemia que aceleró el interés por el e-commerce, pues los expertos pronosticaban un uso intensivo en los próximos tres o cinco años, pero su boom se anticipó al lograr todo este crecimiento tan solo en el 2020.

Aunque en 2021 pudiera disminuir el ritmo, conforme se vayan reactivando las actividades presenciales, es una tendencia que llegó para quedarse como lo demuestran las inversiones en este sector, ya que anteriormente “había empresas de retail que antes, no le ponían ni un centavo a la venta online”, reconoce Lonardi.

“El online vino para quedarse y el nuevo estándar de entrega acortó los tiempos”.

Recibir un paquete en siete días ya es cosa del pasado porque hoy el cliente está exigiendo más velocidad, agrega el entrevistado.

Dinero extra

Los clientes quieren que de preferencia el pedido les llegue el mismo día o tener la posibilidad de retirarlo en un punto, puede ser un Oxxo o cualquier local que le quede de paso al salir del gimnasio o del trabajo, indica Lonardi quien explica que por eso su empresa creó los “Treggo Points”.

Para su operación se cuenta con una app disponible en Argentina y próximamente en México. Mediante esta, los dueños de tiendas o locales pueden dar el servicio de entrega y recepción de paquetes a cambio de recibir una compensación por parte de Treggo.

”El negocio se beneficia porque recibe un ingreso extra y además puede mostrar su marca y sus productos exhibidos. Así, esto se convierte en una relación ganar-ganar”, explica Lonardi.

Para operar un Treggo Point los requisitos son: descargar la app donde se debe marcar el ingreso y salida de cada paquete, (por lo regular son paquetes de menos de cuatro kilos), disponer en la tienda de un espacio libre de al menos 5 metros cuadrados para almacenar y resguardar la mercancía, generalmente proveniente de algún retail o tienda de autoservicio, así como tiendas departamentales, tener horario de 8 de la mañana a 8 de la noche (o más), contar con local ubicado en zona de tráfico y tener RFC.

Uso de drones

Hoy la distribución relacionada con la venta online enfrenta retos logísticos en ciudades de alta densidad que pueden afectar el costo del e-commerce, principalmente porque la frecuencia de entrega es de paquetes pequeños. Pero también el tráfico, accidentes y problemas de estacionamiento pueden afectar las entregas en tiempo y forma.

Es por eso que la mayoría de empresas del sector, están en constante proceso de innovación y uso de tecnología.

Aunque existe interés en implementar el uso de drones o vehículos autónomos, todavía es temprano para que sea una realidad cotidiana, reconoce Lonardi.

“Un dron tiene siempre un problema de autonomía y distancia. Las baterías de estos artefactos todavía no están muy desarrolladas para trayectos largos y también tienen el problema de carga, pues no puede llevar mucho peso”, menciona.

Si bien se trata de tecnología limpia, que no contamina y es interesante la idea de utilizarla para este fin, todavía hay bastante por recorrer en aspectos legales, dice Lonardi.

Estados Unidos aprobó recientemente dos regulaciones para vehículos autónomos, específicamente para uso de drones y es de los países más vanguardistas. Sin embargo, países latinoamericanos como México, Argentina o Chile, todavía están lejos de adecuar su uso.

“Veo un faltante de marco regulatorio que todavía debe avanzar. Es quizás porque la tecnología camina más rápido que las propias legislaciones y todavía no se ve en la práctica como algo que pueda suceder en el corto plazo”, concluye el entrevistado.