La escasez y el encarecimiento de las materias primas son algunos de los problemas que se recrudecieron durante los momentos más críticos de la pandemia de COVID-19 y que a la fecha tienen a varias empresas tradicionales de Jalisco en serios problemas, algunas al borde del cierre.
En el intento por recuperar las ventas, las industrias duramente afectadas por el aumento de la inflación en los precios al productor; como la mueblera, moda y restaurantera, optaron por asumir esta alza en los costos, sin repercutir al consumidor final.
Esto significa que redujeron sus ganancias, pero incluso en varios de los casos la situación los está orillando a experimentar márgenes negativos, indicó la profesora investigadora Angélica Basulto Castillo, del Departamento de Estudios Regionales-INESER del Centro Universitario de Ciencias Económico Administrativas (CUCEA).
Una primera aproximación del efecto que la emergencia sanitaria generó en sectores tradicionales de la economía jalisciense, lo revela el estudio realizado por especialistas de la Universidad de Guadalajara, quienes entre otros puntos encontraron que 85% de las empresas enfrentaron aumentos en insumos y materias primas, pero 87% prefirió no subir el precio de sus productos para mantener su clientela.
A la fecha, el peligro de la inflación sigue latente ya que, según datos recientes, el indicador continúa alejándose del objetivo establecido por el Banco de México, de entre 2 y 4%, al ubicarse a nivel nacional en 4.67% a tasa anual durante marzo de este año.
Este aumento inflacionario resultó todavía mayor en el caso de Guadalajara, pues en el mismo mes de marzo del 2021, la tasa anual alcanzó 5.27% de acuerdo con datos del Instituto de Información Estadística y Geográfica de Jalisco (IIEG). Este porcentaje fue mayor a la inflación reportada en el mes previo de 4.59%, ligando tres meses consecutivos al alza y sumando siete meses con un rango mayor al promedio nacional.
En tanto que el Índice Nacional de Precios al Productor del INEGI, en industrias manufactureras del país, subió 5.61% a tasa anual desde marzo de 2020 a marzo del presente año.
- Reactivación
El tema de la inflación no es menor después de una caída en ventas que fluctuó entre 20 y 90% en industrias representativas de Jalisco, entre ellas la restaurantera, joyera, confección-vestido, calzado y muebles donde la pandemia afectó a casi 89% de las empresas.
El análisis se elaboró con base en una muestra representativa de 90 establecimientos, entre septiembre de 2020 y enero de 2021; en municipios como Guadalajara, Zapopan, Ocotlán y Puerto Vallarta, aunque todavía en marzo se mantenía el estancamiento en la mayoría de los sectores productivos.
No obstante, ocho de cada 10 empresarios jaliscienses confían que la recuperación será exitosa en la medida que avance el proceso de vacunación contra el coronavirus, indicó Javier Medina Ortega, profesor investigador del Departamento de Estudios Regionales-INESER de la casa de estudios.
- ¿Cómo están sorteando los problemas?
La mayoría de las empresas implementaron estrategias para sobrevivir y continúan adaptándose a las nuevas necesidades. Algunas voltearon a ver nuevos mercados, impulsaron sus ventas por internet y ahora buscan financiamiento para mejorar sus páginas web o comprar equipo, destacó Medina Ortega.
Aproximadamente 16% de las empresas encuestadas que implementaron algún sistema de ventas remotas, tuvieron 10% de mejoría en este renglón, pero solo 1% de quienes adoptaron nuevas estrategias logró recuperar hasta 50% de las ventas.
La pandemia les exigió a los empresarios una gran cantidad de adaptación e innovación de la forma en que venían desarrollando su modelo de negocio, indica el estudio.
También identificó que 52% de las empresas sorprendidas por la pandemia contaba con un crédito en curso y por ello, la mitad tendría problemas para poder hacer frente a sus compromisos financieros, mientras que 71% estaría buscando créditos adicionales para incorporar nuevas tecnologías.
- Apoyo fiscal
Un punto importante es que las empresas tuvieron poco apoyo de parte del gobierno, tanto federal, estatal como municipal, pues de 53% que procuró apoyos gubernamentales debido a la suspensión obligatoria de actividades por la pandemia, solo 49% lo encontró.
Adicionalmente, algunos establecimientos se toparon con la insensibilidad de las autoridades pues, en plena pandemia, fueron sancionados por haber mantenido operaciones.
Los especialistas manifestaron que las fallas reflejaron un diseño equivocado de las políticas públicas o hubo un problema de comunicación para que los empresarios accedieran a los apoyos o habría sido necesario que se generaran apoyos distintos a los ofrecidos de parte de los tres órdenes de gobierno.
De acuerdo con las respuestas de los empresarios sondeados, el tipo de acción gubernamental que sí consideran necesaria para la reactivación definitiva de las empresas tiene que ver con facilidades fiscales.
“Existe preocupación sobre los pagos del IMSS, Infonavit y el ISR. Requieren deducibilidad de las prestaciones laborales, compensación universal del IVA e ISR y la posibilidad de tener acceso a créditos a tasa cero”, precisó Medina Ortega. Los investigadores concluyeron que cualquier apoyo fiscal que respalde a las empresas en sus problemas de flujo o sirva para resolver su escasez de capital de trabajo, así como medidas que les ayuden a obtener recursos adicionales, son importantes hoy para su permanencia en el mercado.
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