La mayoría de las industrias de México y el mundo han venido lidiando con problemas poco comunes en los últimos 3 años: confinamiento, trabajo remoto desde casa, escasez de chips, choque en la cadena de suministros, fuerte inflación, entre otros.
Sin embargo, hay empresas que están dispuestas a enfrentar los retos, como las del sector productivo más emblemático de México: El tequilero.
Desde 2020 cuando el mundo fue sorprendido por una de las pandemias más virulentas; la de COVID-19 y actualmente con un conflicto bélico incierto debido al poderío militar de Rusia, que amenaza con generar el fin de una era, la industria del tequila ha logrado mantener su dinamismo.
Impacto en suministros
Hay 2 sectores que enfrentan aumentos de precios muy por encima de la inflación, el agroindustrial donde en un año los costos han subido 10.3% hasta marzo del 2022 y la industria manufacturera donde el aumento para los fabricantes es de 9.5%, de acuerdo con el Índice Nacional de Precios al Productor del Inegi.
Industrias como la automotriz también siguen con problemas de acceso a componentes y aunque en el primer trimestre de este año la producción aumentó 3.4% respecto al mismo periodo del 2021, hay lista de espera de más de 3 meses en la mayoría de las concesionarias de autos nuevos.
Otras, como la industria tequilera, van sorteando la incertidumbre con mejores resultados, según confirma su líder Luis Fernando Félix Fernández.
Añade que las empresas del ramo siguen produciendo más, a pesar de los inconvenientes en cuanto a logística y disponibilidad de materiales.
“Claramente hemos tenido problemas de abasto. El principal problema para todos los tequileros es la escasez de vidrio, tapas y etiquetas. Además de los problemas de disponibilidad de carga y transporte y los costos asociados, primero a la pandemia y ahora al conflicto bélico de Rusia con Ucrania, que incrementó los precios enormemente. El costo de un contenedor que viaja de México hacia Europa ha subido muchísimo. La proveeduría que viene de China llega con retraso, lo que nos ha costado mucho más”, describe el líder industrial.
En México la inflación está arriba de 7% y muchos proveedores están tratando de llegar a niveles de entre 7 y 8% de incremento como mínimo, dice el dirigente de la Cámara Nacional de la Industria Tequilera.
Más tequila
Lo positivo para este sector es que ni la pandemia, ni los recientes acontecimientos de la guerra han mermado su producción.
En el primer bimestre del 2022 la producción de tequila alcanzó 92 millones de litros, con un crecimiento de 25% contra la producción récord del 2020.
En 2021 se mantuvo el crecimiento con 527 millones de cajas. Un aumento de casi 40% en comparación con el año en que inició la pandemia de COVID.
Félix Fernández señala que el tequila es actualmente la categoría que más crece en Estados Unidos, junto con el whisky americano y el coñac.
Tequila VS Vodka
Pero las oportunidades del tequila no están asociadas al boicot contra Rusia, sino que la bebida mexicana “se sigue poniendo de moda en el mercado estadounidense y eso permea en otros lugares”, indicó el líder del sector.
Félix Fernández menciona que el vodka se sigue comercializando en Estados Unidos, pues aunque muchos piensan que Smirnoff es de Rusia en realidad es propiedad de la británica Diageo, o que el Stolichnaya es de rusos, pero se produce en Latvia y la francesa Pernod Ricard tiene los derechos de su distribución.
“Quizás Russian Standard y Vodka Beluga son de las pocas originarias de Rusia, pero son marcas chicas en Estados Unidos y venden muy poco”, por lo que no son competencia para el tequila, agrega.
Tampoco se espera un impacto negativo por la guerra, ya que 84% de las exportaciones de tequila van hacia Estados Unidos y el segundo mercado de consumo más importante para la bebida es México. “En Rusia se venden pocas marcas que pudieran resultar afectadas. Quizás tequila Olmeca, pues otros que exportaban a ese mercado eran Diageo y Pernod Ricard y ya manifestaron que no van a hacer negocios en Rusia”, puntualiza Félix Fernández.
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