El peso mexicano se apreció 1.5% ante el dólar estadounidense durante el décimo mes del año de la mano de una debilidad global de la moneda de Estados Unidos.
Las principales razones por las cuales se debilitó el dólar fueron, una recuperación en el valor la libra esterlina, así como las proyecciones de una política monetaria menos agresiva por parte de la Reserva Federal.
La libra esterlina se recuperó 2.65% en octubre después de haber caído durante cuatro meses consecutivos y tocado fondo en septiembre, el mínimo de 1.0350 ante el dólar, en respuesta a un desastroso plan fiscal planteado por la exprimera ministra, Liz Truss. Dicho plan alentaba a no cobrar impuestos a una parte de la sociedad británica y otorgar apoyos adicionales, como un subsidio al costo de la energía, con la finalidad de reactivar su economía. Pero en un escenario de alta inflación, el plan encendió alertas pues parecía que impulsaría más los precios que bajarlos y generó temores por un endeudamiento adicional. Por lo tanto, los mercados británicos reaccionaron a la baja, desde el mercado cambiario y el bursátil, hasta el de deuda. Pero la moneda británica logró recuperarse después de una serie de intervenciones por parte del Banco de Inglaterra a su mercado de deuda, la renuncia del creador del plan fiscal y posteriormente de Truss. El nuevo primer ministro, Rishi Sunak, canceló el plan de estímulos de la administración previa y anunció que sería a mediados de noviembre que dará a conocer un nuevo plan fiscal adecuado para el momento que está pasando la economía británica.
El Wall Street Journal publicó un informe en el cual mencionaba que algunos funcionarios de la Reserva Federal habían empezado a expresar su deseo de ralentizar (disminuir la intensidad del alza) en el ritmo de los incrementos en su tasa de referencia. Según el reporte, también existe la posibilidad de que el aumento de tasa de interés a celebrarse en diciembre sería inferior a los 75 puntos base que había elevado el banco central en las sesiones previas. A dicho reporte, se alineó la presidenta de la Fed de San Francisco, Mary Daly, quien dijo estar de acuerdo con no elevar tanto la tasa de referencia para evitar enviar a la economía estadounidense a una desaceleración forzada por elevar bruscamente las tasas. El reporte y las declaraciones de Daly provocaron una venta de dólares, disminuyendo su valor a nivel global. El índice dólar disminuyó 0.58% para finalizar el mes en 109.535 puntos. Por su parte, el euro se apreció 0.81% ante el dólar ante la debilidad de este.
Otro evento trascendental en el mercado cambiario fueron las intervenciones del Banco de Japón para tratar de fortalecer al yen. La moneda japonesa acumuló una pérdida del 24.16% frente al dólar durante los primeros diez meses del año ante una política monetaria japonesa de tasas ultra bajas, contraría a la mayoría de los bancos centrales, quienes están elevando sus tasas de referencia para combatir el constante incremento de la inflación. Durante octubre, el banco central realizó dos intervenciones en su mercado cambiario después de que su moneda llegó a depreciarse hasta 151.95 unidades ante el dólar, nivel no visto desde agosto de 1990. Días posteriores a las intervenciones, autoridades declararon que usaron 6.35 billones de yenes (43.2 millones de euros) para tratar de contener al yen. La moneda japonesa finalizó el mes en 148.71 unidades.
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