Pedro Alberto Ramírez Santos
Director de PARS Productions
El 2022 fue un año histórico para artistas y organizadores de conciertos que vieron crecer exponencialmente la demanda de boletos, señala el empresario del ramo, Pedro Alberto Ramírez Santos.
Añade que se rompió récord de taquilla en varias presentaciones musicales en estadios y eventos realizados en México, como no había sucedido en otros años.
El director general de PARS Productions, quien en 2022 obtuvo el premio Adolf Horn al Empresario Joven; galardón con el que se reconoció su exitosa trayectoria de una década como emprendedor jalisciense en la industria de eventos masivos, habla sobre este sector.
También explica cómo su pequeña empresa está logrando ganar participación en este negocio, dominando por Operadora de Centros de Espectáculos (Ocesa) y Ticketmaster, que actualmente forman parte de Live Nation y constituyen el mayor conglomerado de la industria mundial del entretenimiento.
¿Cómo ha sido la recuperación?
Si un sector experimentó una notable mejoría tras el impacto del 2020 por la pandemia de COVID, fue el de eventos y espectáculos multitudinarios, indica Pedro Ramírez.
“En 2022 la industria creció demasiado. Fue un año récord en conciertos, con más sold out. Es decir, boletos agotados por llenos totales”. Todo esto a raíz de que la gente llevaba dos años sin poder acudir a eventos masivos, añade.
Debido a la pandemia, la industria de eventos y espectáculos fue la primera en parar y la última en reabrir. “Por eso la gente estaba ávida de volver a los conciertos”, considera Ramírez.
Desaceleración
Sin embargo, para el 2023 las perspectivas son más conservadoras ante el riesgo de recesión económica, reconoce el empresario.
Agrega que empresas como PARS prevén llevar a cabo un menor número de eventos durante el presente año, “aunque sin bajar la calidad ni el nivel de los artistas”.
Cabe mencionar que, durante 2022, PARS vendió más de 800 mil entradas a través de su propia plataforma, FunTicket. Además, logró llenar totalmente 16 estadios con la organización de diferentes conciertos.
Y si bien Ocesa y Ticketmaster registraron ventas cercanas a los 22 millones de boletos el año anterior, el número de reclamaciones por incumplimiento fue tal, que estas empresas enfrentan varias demandas masivas de los consumidores.
¿Cuánto les benefician las quejas?
Desde la perspectiva de Pedro Alberto Ramírez, si la gente paga un boleto caro para ver a su artista favorito, “no está para que le den un mal trato o le impidan entrar a un evento”.
“Nosotros no vendemos boletos de conciertos, creamos experiencias para que la gente experimente algo importante en su vida. Porque en los conciertos es donde la gente se olvida de sus enfermedades, problemas económicos o emocionales”, añade.
Mientras las grandes empresas organizan 500 eventos al año y uno más, así sea de un artista mundialmente reconocido es “uno más”, para PARS representa “algo especial”. Y al final, “ser pequeño no es una debilidad sino una fortaleza”, agrega Ramírez.
Durante años no hubo una segunda opción y por eso buscan que la calidad sea su principal ventaja. “Cuidamos todo: La oferta de boletos mediante una boletera propia y detalles como que el espectador disfrute el concierto desde cualquier ángulo, no importa si pagó 3,000 o 500 pesos”.
Por esta razón, artistas nacionales e internacionales de la talla de Daddy Yankee, ya ven a la empresa jalisciense como una opción para apoyar sus giras, destaca el entrevistado.
El director de PARS finaliza diciendo que más allá del dinero, para ellos como promotores lo más importante es que los eventos masivos se realicen, pues representan derrama económica para la ciudad.
Tan solo en 2022, durante un fin de semana de 3 conciertos se generaron más de 500 millones de pesos para el área metropolitana de Guadalajara. “Esto es algo muy importante porque representa más fuentes de empleo”, concluye Pedro Antonio Ramírez.
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