Sin duda las nuevas generaciones usan la tecnología para casi todo, y el tema financiero no es la excepción. La comodidad que proporciona la tecnología beneficia en muchos sentidos la vida de las personas.
Las instituciones financieras a raíz de esto han hecho cambios significativos del uso de la banca digital en poco tiempo. Muchos de los servicios que requeríamos del banco ya los podemos hacer desde la comodidad de un celular.
La mayoría de las instituciones financieras han tenido un cambio significativo en el trabajo y la distribución por medios digitales. Los canales y servicios habilitados para la tecnología son más importantes que nunca, al igual que contrarrestar los crecientes riesgos cibernéticos. Y conforme avanzan los años, las organizaciones tendrán que replantear sus productos y servicios, pues los clientes valoran un mayor grado de autoservicio, así como una mejor funcionalidad, disponibilidad y cumplimiento de los productos. El cambio de hábitos del consumidor detonó mucho durante la crisis sanitaria y así continuará, por lo que la banca deberá enfocarse en crear experiencias digitales seguras.
Los neobancos hoy por hoy son una opción más común, decir neobanco ya no es tan ‘neo’ como hace algunos años. Pero ¿Qué son? Un neobanco es una entidad de nueva generación, a veces llamada fintech, por su aprovechamiento de la tecnología y el entorno digital. Se vale de todo lo online para realizar operaciones financieras, desde abrir una cuenta hasta gestionarla desde una aplicación. Su oferta de productos se basa en cuentas bancarias y tarjetas, aunque ofrece otros servicios.
Las nuevas generaciones están buscando instituciones que permitan ahorrar tiempo, buscan no tener que ir a la sucursal para hacer movimientos, que se pueda abrir una cuenta desde la comodidad de tu hogar o tu oficina, que sea seguro, que tengan un excelente servicio vía telefónica o en línea, es decir, que todo se resuelva desde tu ordenador o teléfono móvil.
Han surgido varias opciones con las que se puede tener una tarjeta de débito, una tarjeta de crédito e invertir, sin tener que moverte de tu lugar. Cabe destacar que debes ser cuidadoso e investigar muy bien todo acerca de la institución, que las páginas sean las oficiales, que tengas toda la información, comparar e investigar muy bien todo sobre el producto que vayas a adquirir.
Hoy por hoy se empiezan a escuchar varias opciones seguras en las que se puede obtener este tipo de servicios, donde es muy sencillo abrir una cuenta. Te tardas menos de tres minutos y todo es en línea.
Los pasos son sencillos, ingresas a su página, te piden un correo, comienzas a meter algunos datos, es muy amigable y te van llevando paso a paso para dar de alta tu nip, confirmar tus datos y verificar a qué dirección te enviarán tu tarjeta, firmas el contrato en línea y listo, tienes una cuenta en menos de 3 minutos.
A estas alturas hay personas que no se ven haciendo este tipo de transacciones ya que son de la vieja escuela y no les da seguridad, pero es un hecho que esto va para allá, esto se hará tan común que muchas instituciones de las que conoces se enfocarán en este tipo de servicios, de hecho, Banorte hace poco anunció que cuenta con este servicio totalmente digital.
La era digital en el tema financiero está aquí, y seguramente llego para quedarse. Debemos estar informados y muy atentos para tomar siempre las mejores decisiones financieras y no quedarnos atrás con la ola de cambios que se vienen.
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