El testamento es un acto muy personal, revocable y libre, por el cual una persona capaz dispone de sus bienes y derechos, y declara o cumple deberes para después de su muerte.

Es un acto de amor a los tuyos, y sin duda habla mucho del orden y administración en tu patrimonio. Todo aquello que te costó años de trabajo y esfuerzo se ve materializado, dejando todo en orden para que lo disfrute la o las personas que designen.

Con esta decisión dejas claro cuánto amas a las personas elegidas, pues el documento evita trámites, gastos y molestias innecesarias a los herederos. Es un tema para tener en cuenta en todas las edades, pero especialmente en la vejez.

México está entre los últimos lugares de los países de la OCDE en materia de cultura testamentaria. Se calcula que entre el 17 y el 20 por ciento de los mexicanos elabora un testamento, de ahí la importancia de promoverlo.

Una persona que hace su testamento asegura sus bienes hasta que muere y deja una herencia a las personas de su elección. Al hacerlo, el notario entrega una copia certificada al testador.

Pero ¿qué debemos tomar en cuenta al hacer un testamento?

Antes que nada, debemos tomar en cuenta a los herederos, a los sustitutos de los herederos, en caso de que los primeros fallezcan, y a la albacea, quien administrará los bienes que integran la herencia, hasta su adjudicación.

Puedes comenzar:

1.         Enlistando tus pertenencias. Esto te ayudará a ordenar todos tus bienes e indicar quién será la persona beneficiaria. …

2.         ¿Quiénes serán tus herederos?

3.         Reflexiona sobre las personas que serán tus herederas. …

4.         Elige tu albacea o tutor.

5.         No omitas ningún detalle.

6.         Dale validez al documento

Y también deben saber que cuando se abre el testamento, se le da validez. El costo para abrirlo depende del costo del bien inmueble. Entre más caro el bien inmueble, más altos son los gastos que genera el juicio.

En fin, hacer un testamento solo te traerá beneficios:

1.         Se cumple tu voluntad, tú estableces de manera clara cuál es tu última voluntad sobre tus bienes. No habrá manera de que personas no gratas se aprovechen y se queden con lo tuyo.

2.         El testamento se puede modificar, así que lo puedes hacer en el momento que quieras e ir cambiándolo conforme cambien tus circunstancias y lo puedes hacer las veces que sean necesarias.

3.         La carga se aligera para tus seres queridos; sin duda, este acto evita conflictos entre familiares y amigos cercanos, producto de no lograr un acuerdo en la distribución de los bienes y posesiones de una persona que acaba de fallecer. Probablemente, este punto sea una de las principales ventajas del testamento.

4.         Los trámites para hacer un testamento son sencillos, no es costoso, de hecho, es uno de los trámites notariales de menor valor, aunque se debe considerar que dependiendo del estado en que vivas, su precio puede variar. Por último, recuerda que septiembre es el mes del testamento, y será posible realizar su trámite con un valor mucho más bajo que el habitual.

5.         El testamento es confidencial; otra de las ventajas es que es absolutamente secreto, es decir, nadie, excepto tú, puede acceder a su contenido. Esto te liberará en gran medida de presiones y reclamos por tus decisiones. Recuerda que nadie te podrá reclamar cuando se revele su contenido.